EL
DEPORTE, MÁS QUE UNA ACTIVIDAD FÍSICA
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El
deporte puede vincularse con el juego, el cual se rastrea hasta lo más
primitivo y arcaico de la especie humana reconociéndose por ser un espacio de
creatividad, de lo no-mercantilizable y de lo aleatorio. Si bien ambos se
relacionan, el deporte se convierte en una actividad física con reglas establecidas
en donde es manifiesta la competitividad, además, con la modernidad y el
capitalismo industrial inglés a mediados del siglo XIX se construyeron codificaciones
sobre lo lúdico, distanciando ambas esferas hasta tornarlas autónomas
Una
definición amplia para deporte podría ser que
Es
un fenómeno sociocultural, relacionado con el comportamiento (manifestación) de
la corporalidad lúdico-expresiva del individuo como unidad biopsicosocial que
integra elementos simbólicos, rituales y marcos de acción con diferentes
motivos, intereses y necesidades, escenificando acciones agonísticas,
antagonistas, juegos de diversión, aprendizaje, ejercitación, entrenamiento,
demostración, exhibición consigo mismo, con otros, con la naturaleza, con o sin
implementos, en espacios y tiempos definidos
La
práctica del deporte comienza a promoverse en las escuelas públicas inglesas,
transformándose rápidamente en un pasatiempo con utilidad como instrumento de
disciplinamiento del cuerpo y preparación para la guerra de las élites, guiado
por características como secularismo (en oposición a juegos antiguos con los
rituales religiosos), igualdad, burocratización, especialización, racionalización,
cuantificación y obsesión con los récords. Durante el siglo XX se da la expansión
del deporte hacia las clases populares, generándose el “imaginario democrático
deportivo” que resulta ser la idea de que sólo el mérito garantiza el éxito, gracias
a un espacio democrático de ascenso social imposible de hallar en el mundo
socio-político del capitalismo
Actualmente, el deporte se ha extendido a gran numero de personas
sin desconocer una mayor participación en las ciudades. Su practica está
mediada por actitudes y comportamientos deportivos que cambian de un modo
lento, puesto que “constituyen rasgos culturales que se han forjado a través de
procesos de socialización largos y tienden a reproducirse en el tiempo,
considerándose además que esas actitudes y comportamientos son en general
exógenas al funcionamiento del propio sistema deportivo”
Al tener en cuenta lo anterior, se reconoce que el deporte es más
que una
simple actividad física o juego, por ello al apreciarse su conexión con elementos
políticos, económicos y socioculturales, múltiples disciplinas científicas han
encontrado en este un notable espacio de investigación, el cual debe ser
abordado reconociendo su complejidad y las transformaciones y los nuevos
sentidos a los que está sujeto
El estudio del deporte
Desde
hace décadas el deporte se ha convertido en tema de investigación para múltiples
disciplinas, las cuales han examinado e investigado a este bajo sus bases
teóricas y metodológicas. La diversidad de enfoques para analizar el deporte se
vincula a las concepciones que tiene cada disciplina del conocimiento, por
ello, algunos enfoques consideran al deporte como una “actividad física” con
acento funcional de carácter orgánico, relacionada con el gasto calórico,
mientras que otros buscan teorías sólidas en torno a una disciplina científica
que integre el campo del conocimiento, la cultura física y la educación física
con otras disciplinas de las ciencias de la educación, además, que reivindique la
singularidad del objeto de estudio y la necesidad de desarrollar métodos para
la investigación de las conductas de personas, grupos, organizaciones e
instituciones que promueven, practican y desarrollan el deporte
A
pesar de la variedad de enfoques se reconoce que la investigación del deporte
está constituida por 2 grandes módulos: el de las ciencias sociales y el
deporte y el de las ciencias naturales y el deporte. La cooperación e interacción
entre ambos, ha permitido generar conocimientos, mejorar prácticas, desarrollar
tecnologías y encontrar soluciones o formas de atención a problemas físicos,
sicológicos y sociales
La
interdisciplinariedad en el deporte
Es
importante tener en cuenta que son múltiples las variables que inciden en las
practicas deportivas, trascendiendo de elementos anatómicos y fisiológicos a
hechos políticos, económicos y socioculturales. Los aspectos biológicos, vinculados
a las Ciencias Naturales, han sido de los más analizados, al punto que se ha
llegado a concluir que “los mejores resultados deportivos, corresponden a
aquellos sujetos con unas condiciones anatómicas más favorecedoras para la
práctica del deporte en cuestión” (Esparza, 1993 citado por
Con
base en esta afirmación se han creado ideales corporales, en los que un cuerpo
con determinadas características se convierte en condición necesaria para la
practica de un deporte. Un claro ejemplo de la conexión entre lo biológico y lo
social en el deporte es la idealización del cuerpo. El caso del boxeo muestra que
no existen necesariamente ventajas de orden biológico como un cráneo más
robusto que permita aguantar más golpes o nudillos más gruesos para golpear más
fuerte, sino que es resultado del ejercicio, la práctica y la alimentación
adecuada del deportista
Tal
situación no resulta ser una consideración anatómica simplemente, ni mucho
menos, sino que es producto de la interacción entre fenómenos biológicos y sociales
que vinculan valores e ideales de competencia y alto rendimiento, convirtiendo
la actividad física-deportiva en una competencia y no en un simple habito
saludable,
cada
vez adquiere mayor importancia el cuerpo rendidor, al entender la práctica de
actividad física como un elemento más para aumentar la capacidad de competencia
personal y simbólica en la “sociedad del rendimiento”. Se trata de actividades
que, en sus acciones comerciales y promocionales, utilizan la imagen épica de
un cuerpo rendidor, y que suelen destacar el hecho de que la superación con
éxito de la prueba capacita a sus practicantes para obtener un mayor
rendimiento en todos los ámbitos de la vida (profesional, personal, etc.) y les
sitúa por encima del resto de deportistas y ciudadanos
Un
cuerpo atlético, rendidor y ajustado a los ideales de corporalidad de cada
deporte ofrece ventajas de resistencia en la práctica de este, pero no es del
todo determinante para su dominio. Es importante señalar que el tema del
rendimiento y los resultados en el deporte no deben reducirse a simples medidas
antropométricas o alguna otra característica biológica, dado que los asuntos socioculturales
también juegan un rol muy importante a la hora de alcanzar los mejores
resultados. Es imprescindible una unión entre lo biológico y lo social, reconociendo
que ambas partes ayudan a una mejor comprensión de todo lo que engloba el
deporte, puesto que ciertas características anatómicas por sí solas no podrán
determinar el rendimiento de un deportista ya que este requiere de cierto
interés, que suele estar permeado por aspectos sociales como la competitividad,
el verse bien y el deseo de reconocimiento para practicar el deporte y
desarrollar las habilidades que le permitirán obtener buenos resultados
deportivos.
El
deporte no solo involucra a los actores que practican la actividad física, sino
que detrás de esto hay sociedades completas que participan como espectadores,
financiadores, promotores, productores, controladores. Ante la cantidad de
personas que resultan involucradas es necesario analizar factores sociales como
la competitividad, el deseo de reconocimiento, la identidad, las relaciones de
poder, la violencia, teniendo en cuenta el trasegar
del deporte hacía la esfera política, económica y sociocultural
Las
transformaciones en el siglo XIX sacudieron las sociedades occidentales,
implicaron una rápida generalización de los deportes, bien para canalizar las
aspiraciones de los no burgueses, bien para someter a otras formas de control
unas prácticas crecientemente comercializadas. En este marco se mostró la
potencialidad integradora y la capacidad para generar emociones que el deporte
implicaba, algo que se hizo más perceptible conforme el nacionalismo se
consolidaba como la gran fuerza política e ideológica desde fines del siglo
XIX. Dado que el deporte tendía a incorporar adeptos de sectores sociales cada
vez más amplios, dado su interés económico a través de los espectáculos de
masas, dada su creciente importancia en las relaciones entre naciones y grupos
sociales, su utilidad política, ideológica e identitaria fue una manera de
defender los esquemas sobre los cuales se había construido el entramado social.
Este proceso alcanzó un especial desarrollo en el siglo XX, cuando el deporte
se asumió como tarea estatal, tanto en sentido político como social. De forma
paralela, la creación de organizaciones deportivas supranacionales implicó la
necesidad de someter muchas de las prácticas locales al marco más amplio,
global, que el deporte estaba alcanzando, desde el punto de vista normativo, de
su difusión e interés económico
Dentro
de este entramado que envuelve al concepto de deporte, se esconden elementos
como el deseo de estatus, la identidad, la pertenencia a un colectivo, rituales,
discursos relaciones jerárquicas
Conclusiones
Se
reconoce la gran influencia que tiene la sociedad, y su cultura, en la práctica
de actividades físico-deportivas. Así mismo se aprecia que el deporte está
permeado considerablemente por elementos políticos y económicos. La complejidad
del deporte lo lleva a ser más que una simple actividad física, y lo convierte
en fenómeno político, económico y sociocultural que obliga a integrar elementos
de las Ciencias Naturales y Sociales con el fin de alcanzar una mayor
comprensión de este. Aspectos como la religión, el cooperativismo, las tradiciones,
los comportamientos, las actitudes, la identidad, las representaciones del
cuerpo y la alimentación, que suelen forjarse a través de procesos de
socialización que se reproducen en el tiempo, son algunos de los temas
analizados por los investigadores. Sin embargo, no son los únicos aspectos a
tener en cuenta, pues temas biológicos como la nutrición, el biotipo, la
composición corporal y las características corporales también son muy importantes
a la hora de relacionar el deporte con la vida y el rendimiento físico de
quienes lo practican.
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